El alojamiento contaba con todo lo necesario, incluyendo

una habitación cómoda y agua caliente. La atención de Hassan y las chicas fue excepcional. El único inconveniente fue que la señal de internet era un poco inestable en algunas áreas. En general, es una experiencia que recomendaría.

Ubicación tranquila, patio interno acogedor, buena presión de ducha

Las habitaciones tienen un toque anticuado y un ligero olor a humedad!!! La entrada puede ser confusa, requiriendo orientación clara para no frustrar a los nuevos visitantes!!! Las toallas no secan bien, un detalle que puede irritar en climas cálidos!!!

La ubicación es inmejorable, a pocos pasos de la plaza Jemaa El Fnaa, lo que facilita explorar la ciudad. El desayuno en la terraza es delicioso, incluyendo café, zumo y bollos. La atención del personal es excepcional, siempre dispuestos a ayudar con cualquier duda sobre tours o restaurantes.

El tamaño de la habitación y el baño es bastante reducido, lo que puede resultar incómodo para quienes buscan más espacio.

Esto te ahorrará tiempo y dinero

La ubicación es inmejorable, a solo un minuto de la plaza Jemaa El Fnaa. El personal es increíblemente amable y habla español, lo que facilita todo. El desayuno sencillo pero delicioso, ideal para empezar el día. La azotea "chill out" es el lugar perfecto para relajarse después de explorar la ciudad.

La verdad, no sé qué esperaban. Las almohadas eran lo único decente, ya que la cama estaba tan mala que ni siquiera ofrecía un descanso. Además, el aire acondicionado hacía mucho ruido y no lograba enfriar. Pensé que al menos me harían sentir especial, pero claro, eso es solo un lujo que otros disfrutan. No puedo creer que no me ofrecieran un upgrade. No vuelvo.

El riad tiene una ubicacion excelente, a solo minutos de la plaza! el desayuno incluido es delicioso, especialmente el café (me encantó). El personal es súper amable y siempre dispuesto a ayudar con recomendaciones necesarias.

No había nada que no me gustara.

El desayuno era variado y se servía en la terraza. La habitación era un poco pequeña.

Desayuno delicioso y excelente atención

Disfruté de una estancia muy gratificante. El desayuno era espacialmente abundante con bollos frescos y un increíble jugo de naranja. La amabilidad del personal realmente hizo la diferencia, siempre estaban dispuestos a ofrecerme consejos útiles sobre qué ver en la ciudad. Sin embargo, el baño era un poco pequeño y podría ser incómodo para quienes busquen más espacio.

Wi-fi excelente, pero las toallas no secan bien. Atención del personal muy amable.

Estuve en el Riad Espagne durante 4 noches y me sentí como en casa. La atención de Hassan y el equipo fue increíble. Te reciben con un mapa detallado de la ciudad y recomendaciones personalizadas. Las habitaciones son básicas pero muy limpias. las camas son cómodas, ideales para descansar. Aproveché mucho el desayuno en la azotea, que consistía en bollos frescos y zumo. en especial, me encantó la sandía que nos ofrecieron para refrescarnos del calor. La ubicación es perfecta. a solo 2 minutos de Jemaa El Fna, lo que facilita explorar el corazón de Marrakech. Pero la ducha a veces presentaba problemas con la presión del agua, y el baño era un poco pequeño, lo que podría incomodar a quienes buscan más espacio. Aún así, son detalles menores en comparación con la agradable experiencia que tuve.

La ducha tenía buena presión y el desayuno era abundante, con bollos frescos cada mañana. Definitivamente, volvería a este lugar encantador.

Estuve con amigos y nos encantó. La atención de Hassan fue excelente, siempre atento y ayudando con recomendaciones. Desayuno riquísimo en la azotea. Visitamos el Jardín Majorelle y la plaza central, y fue genial. Consejo, aprovechen la oferta de tours, están muy bien de precio.

Tuvimos una decepción al llegar, ya que nos llevaron a otro hotel la primera noche porque no había espacio, aunque teníamos reserva. Fue incómodo, pero luego todo mejoró.

La amabilidad del personal nos hizo sentir como en casa. Además, la ubicación es perfecta para visitar la medina y disfrutar de su ambiente. Con mi nieta hicimos un par de excursiones y cada día era una nueva aventura.

A mis hijos les habría encantado que las habitaciones fueran un poco más espaciosas.